No tires las cápsulas de café al contenedor amarillo. Te contamos qué puedes hacer con ellas, dónde tirarlas y la alternativa de las cápsulas recargables.
El café es la bebida más consumida en el planeta, con una media de 7,5 kilos por persona. Por desgracia, a mayor consumo de cápsulas, más residuos generan. Es por esto por lo que debemos aprender a reciclar bien estas cápsulas.
Las cápsulas de café debemos tirarlas en los puntos de recogida que habilita cada fabricante. Estos puntos suelen ser las propias tiendas que tienen distribuidas por todo el territorio.
En su defecto, para poder reciclarlas bien, tendrás que separar el café de la cápsula y enjuagarla bien. De esta manera, podrás tirar la cápsula al contenedor amarillo y el café al contenedor gris.
¿Te has preguntado alguna vez cómo se reciclan las cápsulas de café?
La mayoría separan el café y después el aluminio o el plástico, pasan por procesos de limpiado para fundirse y fabricar nuevas cápsulas.
Desde ASUFIN, queremos animarte a que tú mismo reutilices las cápsulas, dándote estas ideas:
- Utilízalas como moldes para bombones, pequeños postres u hornear mini magdalenas. Acuérdate de lavarlas bien y quitar todos los residuos.
- Cuadros originales: con la ayuda de un objeto plano presiona las cápsulas hasta aplastarlas. Elige de diferentes colores y deja que tu imaginación vuele.
- Una guirnalda de luces personalizada: para esta manualidad necesitas una guirnalda de luces. En la base de la cápsula hazle una ranura y mete la luz, de manera que la cápsula haga de pantalla. Puedes hacerle diseños con un punzón o algo puntiagudo, haciendo puntos para que la luz pase por ellos.
- Minijardín decorativo: esta idea te servirá para aprovechar tanto la cápsula como el café. La cápsula tendrá función de macetero, en su interior introduce un poco de café y unas pequeñas semillas.
También puedes usar la alternativa de las cápsulas de café reutilizables: ¿Cómo se utilizan?
Tienen un funcionamiento muy sencillo. Puedes rellenarlas una y otra vez, para darle varios usos sin tener que tirarla cada vez que hagas un café. Es decir, una vez hecho el café, puedes lavarla y estará preparada para cuando quieras volver a utilizarla.
Existen dos tipos de cápsulas que puedes utilizar:
- La opción con mayor resistencia y calidad, son las de acero inoxidable. Son más resistentes a los golpes, a la temperatura e incluso al uso continuado. Además, la mayoría de ellas puedes lavarlas en el lavavajillas para limpiarlas.
- Otra opción son las de plástico, la ventaja es que son más baratas, pero tienen menor resistencia y suelen durar menos tiempo.
¿Qué ventajas tienen las cápsulas reutilizables?
Una de las principales ventajas es que son más ecológicas, por lo que ayudarás al cuidado del planeta. El impacto del medio ambiente será mucho menor y tu economía se verá reflejada
La versatilidad de estas cápsulas es numerable. Puedes utilizarlas para café, pero también para tilas, manzanillas, poleos…
Otra de las ventajas es la durabilidad. Pueden durar desde semanas hasta meses o incluso años. Es decir, cuanto más duren, más cuidado con el planeta y mayor ahorro.
Como ves, todas estas alternativas tienen numerosas ventajas y son mucho más eco amigables que simplemente tirarlas al contenedor gris. Escríbenos en comentarios si sabes alguna alternativa más o algún punto de recogida que no hayamos mencionado.