La presidenta de ASUFIN señala que las asociaciones de consumidores tenemos la responsabilidad de explicar a los ciudadanos el valor que tienen los datos que ceden a empresas y entidades financieras: “Si parece que es gratis, el producto eres tú”
Viernes, 7 de febrero de 2020. La presidenta de ASUFIN, Patricia Suárez, acudió el pasado jueves a Bruselas invitada por el think tank European Retail Financial Forum (ERFF) para disertar sobre el papel relevante que adquiere el tratamiento de los datos en el nuevo escenario de consumo financiero que plantean las operadoras digitales, también conocidas como Fintech.
A este respecto, Suárez recordó que a menudo se piensa que los ciudadanos desconfían de los canales tradicionales bancarios cuando, con los datos en la mano, no es exactamente así: “El estudio elaborado por ASUFIN en base a más de mil respuestas revela que la situación es más compleja y que se confía más en los bancos que en las Fintech”. De hecho, lo que más preocupa es que las grandes tecnológicas como Google, Amazon, Facebook y Apple (conocidas con el acrónimo de GAFA) “lo sepan todo de nuestra vida” al tiempo que paradójicamente, hace notar Suárez, hacemos un uso intensivo de sus plataformas y aplicaciones.
La presidenta de ASUFIN también expuso en Bruselas que el entorno digital plantea una división generacional entre los miembros de la sociedad de mayor edad y que confían en mayor medida en la banca tradicional y los más jóvenes, a los que preocupa menos la cantidad de información en posesión de las GAFA. “A ellos les resulta barato y cómodo operar en esos entornos, hasta el punto de que el 85% cedería mayor cantidad de datos a cambio de obtener más servicios a buen precio.”
“Las asociaciones de consumo tenemos una responsabilidad; hay que explicar a los ciudadanos que nada es gratis o barato, que los datos es los más valioso que uno tiene y ha de cuidar a quien o qué empresas los cede”
Patricia Suárez, presidenta de ASUFIN
De igual modo, “si las grandes tecnológicas quieren competir en el terreno de las entidades financieras tendrán que someterse a las mismas reglas del mercado y la competencia; de lo contrario, resultaría discriminatorio”, apostilló Suárez.