Desde ASUFIN nos preocupamos por tu bienestar financiero, por eso queremos darte estos consejos para que consigas ahorrar y salvar dinero todos los meses.
Con la subida de precios que va in crescendo y el aumento del nivel de vida que la población ha vivido, llegar a fin de mes es cada vez más complicado, por lo que ahorrar parece inviable, por eso te damos estos consejos para que consigas ahorrar y crearte un colchón financiero.
Clasificar los ingresos:
Lo primero que debemos hacer es clasificar los gastos e ingresos al principio del mes. La mayoría de las personas lo hacen a final de mes, lo cual es un fallo, puesto que de esta manera solo se ahorra con lo que ha sobrado, en lugar de apartar y guardar una cantidad desde un principio, de tal manera que no desaprovechemos ni derrochemos dinero innecesariamente. Los economistas expertos recomiendan poner en práctica la regla 50/30/20 (destinar un 50% del sueldo a gastos fijos y variables, un 30% a hipoteca/alquiler y un 20% a ahorro).
Automatiza los ahorros
En estos días, cada vez es más común que todos tengamos la tarjeta bancaria vinculada al teléfono móvil a través de diferentes aplicaciones. Dentro de estas aplicaciones encontramos servicios muy útiles como: clasificar y revisar los gastos, comprobar qué cantidades destinamos a las diferentes categorías (como puede ser gastos en facturas, en comidas, productos tecnológicos, etc) y también encontramos huchas digitales. Estas son una manera de ahorrar dinero, en la cual podremos ir ingresando cada mes distintas cantidades. Las ventajas que encontramos son la posibilidad de automatizar el ingreso de dinero cada mes y en caso de urgencia podemos retirar el dinero cuando lo necesitemos sin tener que pagar ningún tipo de comisión o interés.
Recortar gastos hormiga
Una vez definido el objetivo de ahorro mensual, debemos centrarnos en los gastos que tenemos y recortar los llamados “gastos hormiga”. Decimos que un gasto es un gasto hormiga cuando destinamos pequeñas cantidades de dinero en caprichos o compras impulsivas (como podrían ser un café todas las mañanas, la compra de una prenda de ropa solo por encontrarla rebajada o la suscripción a una aplicación multiplataforma a la que no le demos demasiado uso). La mejor manera para evitar estas pérdidas de dinero es haciendo ejercicios de prueba. Quizás podemos probar a tomar un café en casa o darnos de baja durante un mes de diversas suscripciones. Si después del mes de prueba llegamos a la conclusión de poder prescindir de dichas actividades, lo mejor sería recortarlos para siempre. Esto no significa que no podamos darnos un capricho de vez en cuando, pero lo haremos de manera más escasa y concienciada.
Organizar listas
Comprar de manera consciente, además de ser un término cada vez más sonado y en auge, es una tendencia que nos ayuda y beneficia, tanto a nosotros como al planeta. En cuanto a la compra de prendas de ropa, los estilistas recomiendan comprar menos ropa, pero que esta sea de calidad, que concuerde con nuestro estilo y nos resulte útil en múltiples situaciones. En cuanto a compras de bienes de consumo, la regla no escrita es no hacer la compra con el estómago vacío, pero algunas recomendaciones más útiles pueden ser: reducir el número de visitas a los supermercados y hacer listas para adquirir únicamente lo necesario, para no caer en la tentación de adquirir productos por impulsividad. Aunque si es necesario hacer una visita a los supermercados por la compra de un solo producto en concreto, la recomendación es entrar sin un carrito de la compra, de esta manera cogeremos solo lo necesario y no saldremos con las manos llenas simplemente por imposibilidad física.
Comparativa de precios
Una buena manera de ahorrar dinero es destinando tiempo a organizar y comparar productos y servicios de diferentes marcas. Quizás sea más rentable hacer la compra en diferentes supermercados en lugar de en uno. Demorarse en comparar el precio, la calidad, la cantidad y la utilidad es una manera muy eficiente de ahorrar dinero y de conocer los productos que más se ajustan a nuestros gustos y necesidades.
Dar una vuelta a lo que tenemos en casa
Debemos tener siempre en cuenta los productos que ya tengamos por casa. Es importante dar una vuelta al material que ya tenemos para no comprar en vano. Un ejemplo de la necesidad de revisión de los productos es cuando llega la vuelta al cole de los más pequeños. Debemos dar una vuelta a la papelería que ya tenemos y clasificar los productos que podemos rescatar, para no gastar innecesariamente en nuevos materiales.
Finalmente, si llegamos a la conclusión de que necesitamos renovar los elementos que tenemos en casa, una opción muy buena es vender lo que ya no usemos para conseguir dinero. Tal vez para nosotros lo que ya es irrelevante o inservible, para otros puede resultar ser un tesoro. Te animamos a que participes en la economía circular y empieces a comprar o vender artículos de segunda mano. Los beneficios son enormes; ahorramos dinero y podemos conseguir reliquias que no tienen nadie.
Un día sin gastar
Otro ejercicio de prueba que quizás te ayude mucho es definir un día al mes en el que no gastes nada. Puede ser un día de diario o quizás un día no lectivo. Tú eliges. De esta manera conseguiremos reducir en los pequeños gastos hormiga poco a poco. Si el ejercicio te resulta fácil, puedes aumentar el número de días del reto. Quizás pueden pasar a ser un fin de semana entero o 3 días a la semana. De esta manera seguro que al final de mes notarás los cambios y el ahorro.
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