Es una de las formas más comunes y antiguas de fraude financiero. Te explicamos en qué consiste y te damos las claves para protegerte
Las estafas piramidales siempre han existido pero, en la actualidad, con el auge de Internet y las redes sociales, todavía se ha hecho más sencillo caer en este tipo de estafas. ¿En qué consiste? La estafa piramidal es un modelo de negocio insostenible en el que los que participan ganan dinero reclutando a otras personas para que se unan al esquema. No venden ningún producto ni ningún servicio, solo reclutan gente que, a su vez, ganará dinero reclutando más gente.
Se llama estafa piramidal porque los miembros forman una pirámide, una base de personas que paga por entrar en el modelo sostienen el resto de la pirámide. El funcionamiento depende totalmente de la entrada de nuevos participantes. En el momento en que ya no se puede reclutar más gente, los participantes pierden su dinero, sobre todo los que se han unido más tarde y no han podido reclutar a gente para recuperar su inversión.
¿Qué señales te pueden hacer darte cuenta de que es una estafa piramidal?
- Promesa de dinero fácil: Como dice el refrán, nadie da duros por pesetas. Si te prometen un alto retorno de la inversión y de forma rápida y sin esfuerzo, sospecha.
- El reclutamiento, la entrada principal de dinero: Si te insisten en reclutar a otras personas como principal vía de entrada de ganancias, lo más seguro es que se trate de una estafa piramidal.
- Falta de transparencia: No te proporcionan demasiada información sobre cómo se genera el retorno de la inversión y en qué se invierte el dinero que te exigen para unirte.
Te recomendamos no fiarte de las promesas de dinero y ser escéptico si algo parece demasiado bueno para ser verdad. Además, si sospechas que una inversión se trata de una estafa piramidal, avisa a la policía o a las autoridades.