Nuestro último barómetro recoge que los nuevos productos de crédito rápido amplían plazo a dos meses, con precios TAE que siguen siendo muy elevados, superando el resto de modalidades
Los minicréditos siguen siendo uno de los productos más costosos del mercado de la financiación. La media de precios TAE (que incluye todos los gastos asociados a la operación) observada por nuestro III Barómetro supera el 3.300%, con un operador que superan el 4.000% TAE como Préstamo 10, frente a los más económicos como Wandoo, Cashper y Vivus, que superan el 2.600% TAE.
Como novedad, destaca la irrupción del nuevo plazo de dos meses (60 a 62 días) y que Moneyman, además permite fraccionar, con una primera cuota a los 30 días, y el resto, a vencimiento. Esta modalidad, que se acerca a la de un préstamo convencional, sigue resultando muy cara: la TAE media de los tres operadores que ofrecen el nuevo producto (Fiesta Crédito, Moneyman y Vivus), del 838,00%, es 46 veces más cara que la de una tarjeta de crédito y hasta 128 veces más que la media de los préstamos al consumo, en el 6,55%.
Si traducimos esta TAE al coste que conllevan estas operaciones, observamos que pedir 300 euros a devolver en dos meses a través de un minicrédito cuesta 72,80 euros en intereses, frente a los 2,16 euros de una tarjeta de crédito.
Estamos ante un producto de riesgo importante para los consumidores. No sólo por su elevado tipo de interés, sino porque se dirige en especial a un perfil de consumidor que atraviesa dificultades económicas y que no consigue financiación por vías tradicionales, incluso a personas que tienen registrados impagos en ASNEF.
Especial atención merecen los minicréditos de plazos superreducidos. En plazos de devolución a 7 días para operaciones de 50 euros encontramos una TAE media que supera el 70.300%, lo que da cuenta del peligro de las decisiones exprés de crédito. Y nos seguimos encontrando el producto del minicrédito a un solo día, pensado para adelantos de nómina, pero que conlleva un elevadísimo coste. La operadora Contante, por ejemplo, adelanta 900 euros a un día, cobrando 97,50%, lo que dispara la TAE a los 17 dígitos.