La tecnología permite hoy un grado de fraude que imposibilita al usuario saber si está haciendo uso de los canales oficiales de la entidad o compañía
Los bancos tienen que llegar a pactos reales con grandes tecnológicas, como Meta, Google y Amazon, por poner tres ejemplos muy representativos, porque no podemos responsabilizar al usuario en ningún caso de los fraudes sofisticados a los que estamos asistiendo.
Patricia Suárez explica: “La tecnología permite hoy un grado de fraude que imposibilita al usuario saber si está haciendo uso de los canales oficiales de la entidad o compañía, como el caso del phishing o spoofing. No podemos perder un minuto más. El fraude financiero es el motivo de reclamación más preocupante, según ha puesto de manifiesto el propio Banco de España en su última memoria de reclamaciones”.
Añade: “Apoyamos firmemente medidas que vayan en la dirección de la cooperación múltiple entre administraciones e industria y que permitan ir mucho más allá en la lucha contra el fraude financiero como, por ejemplo, el proyecto Stop Scams UK en el que algunos los principales bancos». británicos, teleoperadoras y gigantes tecnológicos como Meta, Google y Microsoft, colaboran para recopilar información sobre los estafadores y cerrar sus operaciones fraudulentas.