Patricia Suárez ha sido seleccionada para formar parte de la treintena de representantes de instituciones bancarias, empresariales, académicas y de consumo
La EBA, por sus siglas en inglés, con sede en París, es el organismo supervisor bancario de la Unión Europea
Patricia Suárez, presidenta de ASUFIN, se unirá a los 30 representantes europeos que conforman la mesa de asesores (Banking Stakeholder Group) de la Autoridad Bancaria Europea (conocida como EBA, European Banking Authority, por sus siglas en inglés). Suárez participará en el grupo de interés para ser consultado en la aplicación de normas que afectan a toda la industria bancaria europea.
Un momento marcado por las amenazas de crisis económica por la COVID19
La presidenta de ASUFIN accede a la EBA en un momento determinante marcado por las amenazas de crisis económica que se ciernen por todo el mundo como consecuencia de la COVID19. Es especialmente importante no alejar del foco de las preocupaciones en estos momentos al consumidor, el eslabón más débil de la cadena financiera.
“Es un motivo de gran orgullo para ASUFIN formar parte de los más cualificados representantes de la sociedad civil y tener la oportunidad, junto a ellos, de influir en las normativa que finalmente han de acatar las entidades. No cabe duda que nuestra voz allí se expresará siempre a favor del interés del consumidor financiero”, señala Patricia Suárez.
Implantación europea
Su entrada en la EBA coincide con la reciente designación como nueva asociación de consumidores en formar parte de BEUC (Bureau Européen des Unions de Consommateurs), la mayor y más representativa organización, que vela por la protección de los intereses de los consumidores en Europa. ASUFIN es hoy la única asociación de consumo bancario de las 45 de hasta 32 países europeos (entre miembros de la UE y del Espacio Económico Europeo) que se integran en BEUC, y la tercera española que lo hace en su historia, tras la OCU que accedió en 1980 y la CECU, en 1991.
ASUFIN ha trabajado desde sus inicios en el acercamiento a las instituciones europeas, sabedores de que la mayoría de la regulación emana de las autoridades comunitarias. De este modo, forma parte de organizaciones como Finance Watch y Change Finance. Un camino que ahora culmina con la entrada en BEUC y la EBA.